LOS PADRES Y EL CENTRO EDUCATIVO
"¿Es
importante que el colegio también
ayude a nuestros hijos?"
ayude a nuestros hijos?"
Esto es lo
que me pregunto, una madre de familia en un centro educativo, en una hoja de pregunta anónima, menos mal. Por supuesto, conteste, y
además comente, y se los digo a ustedes que me están leyendo. Importa más lo
que nosotros hagamos como padres, porque la responsabilidad primera es de nosotros.
Muchas
veces atribuimos los problemas de los hijos a los centros educativos, colegios o
liceos, cuando los verdaderos creadores de la personalidad del hijo son los
padres. Las instituciones educativas colaboran en los conocimientos
y algunos valores, la formación deriva de nuestro trabajo como padres de
familia.
El “divorcio”
de los padres con el colegio ha hecho que Inglaterra tenga un promedio de un
(1) docente, o dos, agredidos POR DÍA,
por sus mismos alumnos. Por resentimientos, u otros motivos. Por eso los
anteriores disturbios que trajeron abajo el sistema educativo inglés, muy dogmático
y formativo años atrás. Una consecuencia de la incomunicación de los padres con
los centros educativos, un problema que se agravara si continuamos así.
Por
supuesto que hay algunas deficiencias en la actual educación, eso no impide
acudir frecuentemente al colegio, en especial el padre que es muchas veces es
carente de ello, para preguntar al profesor, tutor o coordinador cómo va el
aprovechamiento y desempeño de nuestros hijos en su etapa escolar.
Aconsejamos
muy aparte de la visita periódica al centro educativo, una conversación periódica
con nuestros hijos, una salida distendida sin presiones. Algo comentamos en COMUNICACIÓN PADRES E HIJOS. Puede ser
al parque, a un lindo lugar a comer o compartir un postre, ustedes vean lo mejor.
Además
debemos conocer bien quienes son los profesores o docentes de nuestros hijos.
Saber el tipo o estilo de educación que imparte el centro de estudios, que
vayan de acuerdo a los límites adecuados y los valores primeros del ser humano.
Nosotros hemos visto sorpresas no tan agradables muchas veces. Esto los padres
debemos evaluarlos antes de matricular a los hijos, recuérdalo bien.
Nuestro
deber como padres no es solo reclamar y abogar por los hijos cuando algo es
injusto, sino también velar y apoyar la verdadera formación de nuestros hijos.
Primero debemos observar en que nos hemos equivocado, si hay alguna llamada de
atención de parte de la institución. Nuestra educación no termina en la puerta
de la casa, sino debe continuar en todo ámbito de la vida de nuestros hijos.
Nuestra labor, nuestra misión.
Luis Flores Montes
luisfloresmontes@gmail.com
luisfloresmontes@gmail.com